eightball
eightball strikes hard. Fueled by an abiding sense of loss, the eight stories in this collection take you on a journey across the exploded fault lines of intimacy, unfolding across cities and continents. Whether hitchhiking the Italian Veneto, trekking through a pitch-black Balinese rice field, or queuing for drinks in a crowded Seattle bar, Geoghegan sets her characters adrift in a world that stakes its claim to the enigmatic terrain of desire. This collection of darkly comic, occasionally violent, tales is anchored by the eponymous “eightball,” a coming of age novella about a sister and brother guided by the inertia of recklessness and self-destruction. A protégé of the late Lucia Berlin, Elizabeth Geoghegan writes lyric, place-driven prose laced with edgy realism and wry wit.
A great cast of characters … Fellini-ish
— Lucia Berlin
In the tradition of writers such as Raymond Carver and Dorothy Parker, eightball is acidly funny and tragic; bittersweet.
— Ruth McIver
A masterful collection laced with dark humor, aching grief and great tenderness.
— Francesca Marciano
Emotionally raw, sincere, and relentlessly adventurous.
— Chiara Barzini
Now available in Spanish translation
Bola ocho
Protegida de la fallecida Lucia Berlin, Elizabeth Geoghegan escribe una prosa lírica basada en lugares mezclada con un realismo vanguardista e ingenio irónico. Estas ocho historias nos llevan en un viaje a través de las fallas explosivas de la intimidad, que se desarrollan a través de ciudades y continentes. Ya sea haciendo autostop en el Véneto italiano, caminando a través de un campo de arroz balinés negro como la boca del lobo o haciendo cola para tomar algo en un bar abarrotado de Seattle, Geoghegan deja a sus personajes a la deriva en un mundo que reclama el terreno enigmático del deseo. El relato que da título al volumen tiene como protagonistas a una hermana y un hermano guiados por la inercia de la imprudencia y la autodestrucción.
Una nueva maestra de la mejor tradición del cuento norteamericano.
— Sonia Fides
En sus relatos, hombres y mujeres emparejados, recorren el globo en busca de sosiego e intimidad familiar. Se topan con ligues al borde del incendio y un
chorreón de sátira social.
— Marie Clare
Geoghegan tiene su propia voz, poderosa y en volvente, que logra que el lec tor quede fascinado por una sordidez áspera y un tono des carnado que raspa.
— Eva Cosculluela